Más de 680 Secciones Oficiales y 65 Premios de Dirección, Fotografía y Guión en Festivales Internacionales. Realización de proyectos audiovisuales como director, coach de actores, script, fotografía y producción desde el 2008. Más de 11.700.000 visionados online.
Estas son las estadísticas de Marc Nadal, un director de Barcelona que hoy os traemos a través de una entrevista con motivo del estreno online de uno de sus últimos trabajos: Donde no puedes llegar, un relato sobre el Alzheimer.
¿Por qué esta película: Donde no puedes llegar?
Es una historia que creemos que merece ser contada y muy real para todos nosotros, habla de la familia, del sacrificio, del egoísmo… Creo que puede ayudar a concienciar sobre la enfermedad de Alzheimer, entender al enfermo, sus necesidades, preocupaciones y miedos, además de poner en valor la tarea de los cuidadores, una labor dedicada y comprometida.
Nuestra mayor motivación era retratar las diferentes fases de esta enfermedad, mostrar cómo afecta a la psicología de la propia persona y de quien tiene alrededor.
Personalmente, he querido lanzar en este cortometraje una hipótesis sobre qué ocurre en la mente de alguien con Alzheimer: ¿Cómo son esos momentos de lucidez? ¿Qué ve? ¿Qué siente? ¿Cómo confunde el presente con el pasado? ¿Cómo, de repente, visualiza un recuerdo en su memoria, y lo revive como si estuviera pasando en estos momentos?
Las personas que han impulsado la creación de este proyecto son Félix Cárdenas y José Cano. Félix ha vivido muy de cerca la enfermedad, estando durante muchos años al cuidado de un familiar muy allegado a él, y tenía ganas de convertir todas esas vivencias y conjunto de sensaciones en algo que la gente pudiera ver y compartir. Contactó conmigo y nos pusimos a crear los personajes e historia junto a José Cano.

¿Cuál es el mensaje principal que quieres transmitir con el cortometraje?
Comprensión. Por lo que hemos visto tanto los cuidadores como los familiares que tienen que cuidar a uno de sus familiares acaban sintiéndose muy solos; piensa que en esta enfermedad puedes encontrarte cuidando a tu madre o padre durante 5 o 7 años, cada vez con mayor dificultad, y sumándole además el hecho de que estás viendo como la mente de tu padre o madre se va apagando.
Imagínate la presión, los nervios y vida de ese cuidador. Se juntan muchos sentimientos, muchas dudas y la negación a que algo así pueda pasar. Por ello hago referencia a la comprensión, este cortometraje puede servir para que mucha gente se sienta identificada y sepa que no está sola en este proceso, que esas experiencias vividas también han sido vividas por otras personas, que, a raíz de este video también van compartiendo sus propias experiencias (cómo vamos viendo tras la publicación del video en las redes sociales). Somos seres sociales y es muy importante hacer grupo aunque sea en la distancia.
Además, siento y veo a menudo el rechazo de los familiares hacia la persona enferma, amigos e hijos que se alejan de padres o abuelos. Una sociedad que hace sentir a los enfermos como alguien no querido, no deseado. Eso es algo que hay que cambiar ya que el enfermo, al igual que el sano, forma parte de la sociedad, son ciclos que cada uno de nosotros vivimos en nuestras propias carnes.
¿Cómo fue la fase de investigación en torno al Alzheimer? ¿Conocías de primera mano la enfermedad?
Tenía a un familiar con Alzheimer, sí, sin embargo lo más importante a la hora recoger la información era tener claro tres cosas: cómo afecta la enfermedad a la gente cercana a esa persona, cómo se cuida a esa persona, y por otro lado, cómo le afecta individualmente.
Por ello, a parte del Alzheimer también hablamos de otros conceptos clave para la historia, y son: la identidad -una madre que trata de seguir siendo la misma, y una hija que lucha por cumplir sus metas como pintora convirtiéndose en la persona que siempre ha querido ser-, y el cambio de rol madre e hija, ya que es la hija la que debe dar de comer, acostar o bañar a su propia madre.
Cómo te decía, Félix Cárdenas y José Cano han vivido muy de cerca la enfermedad, han estado cuidando de un familiar muy allegado Félix durante muchos años, y después, Félix ha trabajado algunos años más cuidando a enfermos de Alzheimer en diversas residencias, por lo que su experiencia se convirtió en una fuente de información vital.
A medida que indagábamos en la enfermedad vimos situaciones reales, detalles e historias que son demasiado extensas para contenerlas en un cortometraje.
OS dejamos con Donde no puedes llegar por si no lo habéis visto ya:
Tienes un largo documental sobre la esclerosis múltiple actualmente en festivales: La pérdida del cuerpo. Junto con tus últimos trabajos se ve un interés creciente por la temática social en tu obra ¿Piensas que el cine debe estar en contacto con la realidad y ser de alguna manera, espejo de ella?
Siempre lo es ¿no? Quiero decir que hasta una película de ciencia ficción, que tenga un contexto “irreal”, acaba tratando sobre temas humanos como las relaciones, el amor, la amistad, la justicia, el sacrificio, etc.. Es muy interesante ver como una película nos ayuda a empatizar con gente que no conocemos, o nos ayuda a entender cosas que no habíamos visto desde ese punto de vista desde el que se trata.
Considero que la pantalla cinematográfica es esencialmente una fuente de educación, ya que en ella se nos enseñan las historias de otras personas, sus decisiones ante las adversidades y las consecuencias de las mismas.
Justamente por eso, últimamente me llaman la atención los conflictos sociales y hechos reales, por ello me centro en realizar cortometrajes como “Ciudadanos”, “La condena”, “El espejo humano” o “Donde no puedes llegar”, creo que son historias que merecen ser contadas y pueden ser útiles.

¿Qué diferencias ves entre realizar un documental y una obra de ficción?
Hay muchísimas diferencias y similitudes, además todo depende de cómo ruede cada uno. Ahora bien, en el caso práctico que yo he vivido: “La pérdida del cuerpo”, la preparación del rodaje fue muy diferente a la de una obra de ficción, para empezar no había que crear personajes sino que partía de la vida real de una persona. En una película de ficción puedes representar la historia de esa persona escena por escena, y que el espectador tenga la sensación de que descubre las cosas al mismo tiempo que el personaje, por ejemplo, en una película sobre una persona que se enfrenta a una operación quirúrgica: puedes mostrar al inicio su normalidad, cuando siente el primer síntoma, y después la operación; en este caso el espectador no puede saber si el personaje vive o muere al final.
Sin embargo, sí haces un documental sobre una persona, lo más seguro es que ya haya vivido las cosas que motivan la realización del documental, o si haces un documental sobre un hecho, lo más normal es que ya haya sucedido, por lo que hay escenas que no podrás grabar (si no recurres a recreaciones), por ejemplo, en un documental sobre la persona que se enfrenta a una operación quirúrgica, lo “típico” que se suele ver en el documental, es una entrevista hacia esa persona, por lo que el espectador ya sabe que esa persona sobrevivió desde el inicio, se acercará a la historia de forma diferente.
Obviamente, estoy hablando de la realización más común, hay muchas más formas de hacer un documental y una película ficción.
Lo que sí había que hacer, al igual que en una obra de ficción, era entender bien a esa persona y tener en cuenta sus cualidades, su conflicto y su objetivo, para empezar a crear las escenas clave de la película. Para mí era importante llegar al rodaje con ese listado de escenas, ya ordenadas para buscar el efecto que estaba buscando en el espectador, pese a saber que cada día conocería cosas nuevas de esa persona y mi visión del documental puede cambiar mientras lo grabamos. Un documental está vivo hasta que no entregas la copia final, no sabes lo que vas a acabar rodando al empezar el día, por ello tienes que guiarte de la intuición e ir montando las escenas mentalmente mientras ruedas.
Así fue mi experiencia rodando el documental, mientras que al rodaje de una obra de ficción suelo ir con un guion, guion técnico y todo el mundo sabe a qué hora se rueda cada escena y las pausas para comer, imagínate la diferencia… Hay intuición y hay cambios, pero no como en un documental, ya que te cambia la forma de planificar, los tiempos de rodaje, el hecho de no trabajar con un texto dado ni con actores. Ninguna de las dos cosas es mejor que la otra, ambas son experiencias increíbles eso sí.
¿En qué te género te sientes más cómodo?
En el drama y en el thriller, si hay que escoger. Lo que me interesa es reflejar en planos las emociones del personaje, el género es secundario. Busco historias donde la psicología del personaje sea un factor importante.
¿Qué le dirías a alguien que se dispone a grabar su primer cortometraje?
Que lo disfrutes, eso es lo primero. Si es el primer cortometraje aún tienes que descubrir si te gusta rodar, ver cómo te desenvuelves con el resto de departamentos, o si te gusta montar. Hay muchas cosas por descubrir en un primer corto, así que no te obsesiones, y después, si te gusta, rueda sin dejarte llevar por tendencias ni referencias, porque es importante que puedas hacer introspección y veas cuales son las cosas que realmente quieres contar o te llaman la atención.
Vale la pena grabar un primer cortometraje aunque tengas los medios justos, aunque los actores no sean actores, ni los técnicos sean técnicos. De hecho hasta me parece necesario hacer la fotografía, la producción o ser actor de algún cortometraje para poder entender mejor todos los campos.
Al inicio, me parece importante rodar tanto cortometrajes experimentales como narrativos, probar diferentes géneros, y así vas adquiriendo diferentes formas de contar las cosas, diferentes “códigos”, y más importante, gracias a probar diferentes géneros vas a ir formando tu propio estilo.
¿Tienes alguna idea en el horizonte?
Sí, hay varias cosas en marcha pero es una etapa difícil para la producción, no todos los proyectos salen a la luz, muchos se demoran o caen, lo vemos constantemente, por ello, hasta que no se cierran contratos no hay nada “oficial” que se pueda decir. Por ahora quiero dar visibilidad al cortometraje “Donde no puedes llegar” y al documental “La pérdida del cuerpo”, creo que pueden ser realmente de utilidad para dar visibilidad al alzhéimer y a la esclerosis múltiple, es el motivo por el que los rodamos, y valdría la pena todo el esfuerzo invertido en ellos si la gente puede visualizarlo, identificarse, y compartir sus experiencias. Por ahora, sobre “Donde no puedes llegar” nos han llegado comentarios de familiares, cuidadores y fundaciones de alzhéimer, nos están demostrando que el corto está llegando a la gente, está siendo de utilidad, y es lo mejor que podía pasarle a este proyecto.
Os dejamos con el trailer de «La pérdida del Cuerpo» para cerrar la entrevista:
https://www.youtube.com/watch?v=AJ-kme0f-V8
Más info en Marcnadal.com